miércoles, 16 de junio de 2010

quien se robo mi queso

Hablar de cambio es referirnos a la transición de un estado a otro, y al aventurarnos en el cambio es imposible saber si esta transición será buena o mala, en comparación con el estado anterior.
Los seres humanos, por naturaleza, tememos al cambio, ya sea por miedo a fracasar, por perder la estabilidad que se tiene, ya sea social, económica o emocional, o muchas veces por lo que vayan a decir las demás personas; lo cierto es, que todos, alguna vez en nuestra vida nos hemos rehusado y hemos tenido miedo al cambio.
“Cambiar” es algo que todas las personas debemos hacer pero, ¿por qué?, ¿por qué es tan importante cambiar?, y, ¿por qué nos es tan difícil?
El cambiar ayuda a las personas a sentirse mas libres, además nos saca de la monotonía y rutina diaria de la vida, que muchas veces llega a hacer de nosotros seres aburridos, sin aspiraciones y que simplemente nos conformamos con las pocas cosas que tenemos, sin darnos cuenta que todavía hay mil cosas por descubrir, hacer o experimentar y que el solo hecho de intentarlas nos hace tener mas confianza en nosotros mismos y afrontar de una mejor manera los retos que se nos presenten.
Imaginar como será el triunfo cuando lleguemos a la meta, después de haber cambiado es encaminarnos hacia él, pero no debemos dejar que el triunfo se quede solo en la imaginación o en un sueño, tenemos que luchar por conseguirlo.
Creer que tienes algo y perderlo de repente, exige un cambio inmediato, que no llegara jamás si no estamos dispuestos a hacerlo, y si no contamos con la iniciativa para ello, ya que nadie nos dirá lo que debemos hacer, ni como lo debemos hacer, decidir cambiar está en nosotros mismos.

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